Factotum

Como de islas va la cosa y hoy tengo un cuerpo torero que solo me falta el traje de luces, seré breve en mi entrada de hoy.

La isla del Doctor Moreau, basada en el libro de 1896 de título homónimo de H.G. Wells, nos propone una introspección en las ideas sobre Darwinismo, jugar a ser dios, la naturaleza humana y la identidad del ser.

En una remota isla paradisiaca, el doctor Paul Moreau se dedica a crear quimeras, uniones perfectas humano/animal. Así, es capaz de crear mediante ingeniería genética hombres felinos, lagartos, etc. Se rumorea que Espinete nació aquí.

¿Quién dijo que la vida iba a ser justa?

¿Hasta qué punto es ética la investigación? ¿Qué rige nuestros valores? Tanto la novela como las películas intentan dar una visión acerca de estos y otros temas.

Para la gente que quiera verla, hay dos versiones: la de 1977, con Burt Reynolds interpretando al doctor Moreau y la de 1996, con Marlon Brando en ese papel. Esta película también fue llevada al cine en el año 1932, bajo el nombre Las isla de las almas perdidas (The island of the lost souls).

Cualquiera de las versiones es recomendable y nunca hay que dejar pasar la oportunidad de ver bichos raros en movimiento.